Mickey Páramo finalmente conocà a un chico que ella tiene un no parar de apego. Ella lo vio en un parque de la alimentación de los patos y no podÃa esperar para sentir su polla dentro de ella. Primero en su boca, lamiendo y chupando suavemente y, a continuación, en su apretado coño mojado entrando y saliendo y aportando mucho placer y alegrÃa que ella se negaba a dejar ir. Incluso con su boca llena de este tipo de semen que ella quiere más, más sexo, pero no se su nombre porque esta cosa es la diversión casual, nada más.